💼Cómo podría afectar a tu cartera la desaceleración de China
La economía china se ha enfrentado este año a una situación delicada: turbulencias en el mercado inmobiliario, caída de la divisa, contracción del consumo y descenso de las exportaciones. Y algunos inversores creen que la segunda mayor economía del mundo podría entrar pronto en una racha de pérdidas. Así que, tanto si estáis pensando en apostar por la mala racha de China como si simplemente por defender vuestra cartera, he aquí un útil desglose de cómo podrían caer las fichas.
Para calibrar las posibles repercusiones de una nueva caída de la economía china, Goldman Sachs se remontó a las relaciones históricas y calculó algunas probabilidades. Así es como ven las cosas si el crecimiento del país se sitúa 1,5 puntos porcentuales por debajo de las previsiones actuales:
Acciones: Con este tipo de desaceleración, las acciones del país podrían caer entre un 15% y un 20%. Y no serían las únicas en caer: las acciones de los mercados emergentes (ME) probablemente registrarían una pérdida del 13%, las acciones japonesas probablemente registrarían un descenso del 9%, y las acciones europeas probablemente sufrirían un retroceso del 4%-5%. Las acciones estadounidenses, por su parte, se mantendrían bastante estables, con una pérdida de sólo el 2%. Hay que tener en cuenta que estas estimaciones se basan en gran medida en datos anteriores, y que los mercados actuales podrían marcar su propio rumbo.
Materias primas: A China le encantan las materias primas. Por ello, una caída en el ritmo económico del país podría provocar una sacudida en los mercados de materias primas. El cobre podría sufrir una caída del 20%, y los precios del petróleo podrían bajar un 10%. En cuanto al oro, podría tambalearse un poco. Por supuesto, el lado positivo es que esto podría ayudar a aliviar las presiones inflacionistas mundiales.
Divisas: Cuando las cosas se ponen difíciles, el dólar estadounidense tiende a brillar. Goldman estima que las divisas más afectadas por un contratiempo en China serían el dólar australiano y el canadiense, que se depreciarían un 10% y un 5% respectivamente. En el lado positivo, el yen japonés podría flexionar un poco, dada su reputación de refugio en tiempos tormentosos.
Tipos de interés: Una ralentización del crecimiento chino sería probablemente una buena noticia para los precios de los bonos, y haría bajar su rentabilidad inversa en unos 0,25 puntos porcentuales, según Goldman.
Por lo tanto, si estáis interesados en estos activos, debéis estar atentos a la dinámica. Y, si estáis pensando en apostar a lo grande en la próxima barajada de la economía china, podríais considerar apostar por los posibles ganadores y tomar posiciones cortas en los posibles perdedores.